Hace bastante tiempo que el yoga cruzó las fronteras de Oriente y se ha instalado para quedarse en este lado del mundo. Con la masificación de esta disciplina, se han conocido nuevos beneficios para la salud física y mental de quienes la practican. Entre ellos, los niños. Muchas son las ventajas que aporta el yoga para el desarrollo integral de tus hijos.
Estimular la creatividad, imaginación y sensibilidad, además de generar una conciencia del cuidado del cuerpo son solo algunos de los beneficios que entrega la práctica del yoga en los niños. Conoce cómo esta disciplina puede ayudar a tus hijos a desarrollar su coordinación física y mental.
Conciencia del cuerpo
Los niños deben desarrollar la coordinación, el equilibro y el autocuidado corporal a través del método “ensayo y error”. Estudios han revelado que el yoga enseña a los niños a moverse de una manera más calmada y así sentir qué está ocurriendo en su cuerpo. Equilibrándose en una pierna o practicando posturas básicas como el triángulo, ellos aprenderán a usar sus músculos para lograr balancearse fácilmente.
Autoestima
El ejercicio es un elemento fundamental para fortalecer la autoestima desde la infancia. Al mejorar su equilibrio, fuerza, coordinación y flexibilidad por medio del yoga, los niños adquieren nuevas habilidades que estimulan su confianza e independencia. Introducir elementos de yoga en los juegos tradicionales de los chicos, es una excelente forma de permitirles expresar su creatividad y disminuir la vergüenza al presentarse frente a otros.
El ejercicio es un elemento fundamental para fortalecer la autoestima desde la infancia. Al mejorar su equilibrio, fuerza, coordinación y flexibilidad por medio del yoga, los niños adquieren nuevas habilidades que estimulan su confianza e independencia. Introducir elementos de yoga en los juegos tradicionales de los chicos, es una excelente forma de permitirles expresar su creatividad y disminuir la vergüenza al presentarse frente a otros.
Fuerza
El yoga utiliza la mayoría de los grupos musculares importantes. En un comienzo, los niños pueden practicar algunas posturas simples y poco a poco ir desarrollando su fuerza corporal. Se busca la relajación, mediante clases divertidas, y no la competitividad. Por ejemplo, que una postura parezca chistosa para los niños es mejor para motivarlos en un ambiente de respeto y comprensión.
El yoga utiliza la mayoría de los grupos musculares importantes. En un comienzo, los niños pueden practicar algunas posturas simples y poco a poco ir desarrollando su fuerza corporal. Se busca la relajación, mediante clases divertidas, y no la competitividad. Por ejemplo, que una postura parezca chistosa para los niños es mejor para motivarlos en un ambiente de respeto y comprensión.
Flexibilidad
A los niños les gusta intentar alcanzar el mayor estiramiento posible en las posturas de yoga, lo que obviamente incrementa la flexibilidad muscular. Mientras tratan de hacer los ejercicios, se les enseña a no exigirse demasiado, aprenden que si presionan mucho a su cuerpo, sus músculos se acalambrarán. Al trabajar una postura de yoga durante varias clases, adquieren la paciencia necesaria para lograr sus objetivos. A través de estas prácticas no solo flexibilizan el cuerpo, sino que también la mente.
A los niños les gusta intentar alcanzar el mayor estiramiento posible en las posturas de yoga, lo que obviamente incrementa la flexibilidad muscular. Mientras tratan de hacer los ejercicios, se les enseña a no exigirse demasiado, aprenden que si presionan mucho a su cuerpo, sus músculos se acalambrarán. Al trabajar una postura de yoga durante varias clases, adquieren la paciencia necesaria para lograr sus objetivos. A través de estas prácticas no solo flexibilizan el cuerpo, sino que también la mente.
Relajación
Todos sabemos que el yoga entrega herramientas útiles para lograr un nivel profundo de relajación. Cuando los niños realizan estas posturas y estiramientos del cuerpo, les resulta más fácil relajarse. Ejercicios simples de respiración pueden ser aplicados por los niños cuando se vean envueltos en una situación de estrés. Sin duda, un aprendizaje para toda la vida.